miércoles, 1 de julio de 2009

Horizonte

las plantas secas, el piso de madera,
el pedazo de nylon que impide que mis pies
ensucien el sillón,
la pared verde que termina
donde comienza la planta baja.

esta mirada sólo permite ver
la superficie de las cosas.

será que alguna vez sentimos
que esta visión lo atravesaba todo,
que el ojo del volcán era nuestro,
que esa lava caliente nos alimentaba
como agua de manantial.

1 comentario:

tomás augusto dijo...

bravo hermano! otro más al carro de los buenos poemas!